"China" Suárez: "No le tengo miedo a las críticas"
La actriz charló con DiarioShow.com sobre su papel, tomado de la vida real, como Raquel Zimmerman, una prostituta polaca. "Lo distinto siempre se lo va a criticar. Lo único que espero es que no me hagan memes", afirmó.
@Belucandiaok
Comenzó desde muy pequeña en el mundo artístico de la mano de Cris Morena. Participó en “Chiquititas”, “Rincón de luz”, “Floricienta”; pero su protagónico en “Casi ángeles” la catapultó a la fama y la posicionó en los medios.
Eugenia “China” Suárez actualmente protagoniza “Argentina, tierra de amor y venganza”, por El Trece, junto a su pareja, Benjamín Vicuña, Delfina Chaves, Albert Baró y Gonzalo Heredia.

La blonda, de 27 años, tuvo poca presencia mediática desde el nacimiento de su hija Magnolia, en febrero del año pasado, por eso las expectativas con su regreso al prime time televisivo eran altas. Pero según ella misma cuenta, el papel de Raquel Zimmerman la convenció.
Se trata de una inmigrante polaca que se vio obligada a ejercer la prostitución apenas llegó a la Argentina de los años 30, con la ilusión de una vida mejor y un matrimonio provechoso. El suyo es un papel tomado de la vida real: comparación de otros personajes que tuvo que interpretar a lo largo de su carrera, este es real.

Raquel fue la primera mujer en desbaratar la red de trata más grande del país en ese entonces, conocida como Zwi Migdal. “Fue un desafío. Es un personaje complejo y me encanta. Me parecía de mucha oscuridad, pero muy actual. Para la interpretación me ayudaron mucho mis compañeros y me sirvió estar en el contexto del burdel”, contó la actriz a DiarioShow.com.
Acerca de cómo preparó este rol describió: “Tuve una maestra de polaco, una mujer que vive acá hace 40 años. Me costaba saber con qué tono iba a hablar mi personaje cuando comenzara a aprender más palabras en español”.
¿Le preocupa que haya opiniones negativas? “No le tengo miedo a las críticas, estoy acostumbrada y creo que a lo distinto siempre se lo va a criticar. Lo único que espero es que no me hagan memes. Algunos me harán bullying y a otros les gustará”, sostiene la "China".

Aunque la ficción habla de una Argentina de hace casi 100 años, la trata y la explotación sexual sigue existiendo, de forma clandestina. En relación con el avance de la mujer a nivel social, Suárez señala: “Antes no se nos escuchaba, la mujer estaba en una situación de sumisión y esto era aceptado. Si bien ahora eso está cambiando, espero que la generación de nuestros hijos lo puedan ver consolidado”.
Sobre cómo es compartir trabajo nuevamente con Vicuña contó: “Está bueno, aunque no nos cruzamos porque son historias paralelas. Cuando llego a casa le hablo sobre la ficción porque me pasa algo con este trabajo que nunca me pasó. Me siento contenta y entusiasmada por el clima, el guion y los compañeros que me rodean”.
